Era un Desconocido

Su carrera comenzó al revés. Aún no debutó en la Primera de River, pero fue convocado a la Selección Mayor y lo quisieron llevar al fútbol europeo. A los 18 años se afirmaba con un gran futuro por delante.
 
Los primeros flashes le llegaron por su llamado a la Selección de Marcelo Bielsa cuando aún era un desconocido: "Con Bielsa hablé poco pero todo el cuerpo técnico de la Selección me dijo que tomara la experiencia con tranquilidad", señala mientras sigue pensando en el Sub 20, que es la Selección a la que "pertenece" por edad. Y luego afirma: "Lo del Sub 23 también fue sorpresa. Después de un entrenamiento con el Sub 20 me llamó José Pekerman y me dijo que viajaba a Mendoza para enfrentar a Chile por el Sub 23 porque se habían lesionado Pablo Aimar y Román Riquelme. En ese partido entré un rato pero igual estaba contento. Después viajé a Córdoba y jugué contra Dinamarca. Ahí sí que me equivoqué feo y metí un gol. La verdad es que fue un golazo. Esa es otra de las cosas que nunca me voy a olvidar", comenta con una sonrisa enorme. Cuenta que su experiencia con la Se lección mayor será imborrable: "En la concentración todo era nuevo. Fuimos algunos juveniles (con él estuvieron Cristian Grabinski, Fabricio Coloccini y Julio Arca) y fue espectacular. Lo más valioso fue que todos me trataron de igual a igual y eso es muy bueno. Porque hay que tener en cuenta que yo no había salido nunca del país y de repente estaba en España, lejos de mi casa y con esos monstruos", dice acentuando con los ademanes cada una de sus afirmaciones. Es que con la gira de la Selección a España (para los partidos ante Español de Barcelona y el seleccionado local de Raúl y de Guardiola) vivió algo así como el sueño del pibe. Esa experiencia cambió su panorama en River. A poco más de un mes de la travesía por Europa, la vida de D'Alessandro dio un vuelco. Y lo que parecía lejano sucedió de golpe. El 17 de enero arregló su primer contrato a las corridas. Porque los dirigentes de River se enteraron de que un representante quería llevarse al pibe utilizando la patria potestad y reaccionaron a tiempo. Así, Andrés firmó por tres años y también viajó a la pretemporada con el plantel mayor: "Fue una de las alegrías que me dio el fútbol hasta ahora. Tenía esa ilusión y por suerte se me dio. Y ni que hablar cuando jugué por la Copa de Oro ante Independiente", afirma. También tiene tiempo para hablar de Carlos, su padre, que ahora es taxista pero de chico supo jugar en la reserva de Almagro y por eso lo ubica en el mundo del fútbol: "Me habla para que esté tranquilo, sin desesperarme. Yo lo escucho porque el tiene más experiencia", dice. A esa experiencia se aferra para mantener los pies sobre la tierra cuando las ofertas llueven: "tengo que esperar. Yo sé que en mi puesto están Pablito Aimar y Damián Alvarez. Pero de a poco se me va a ir dando. Quiero quedarme en River. Cuando llegó (Américo) Gallego dudé un poco, pero ahora confío en tener una chance. De todas las ofertas y los rumores que corren no sé nada. Yo tengo claro que debo estar al margen porque recién tengo 18 años y todavía me falta mucho", comentaba con madurez acelerada. A pesar de que los sueños cambiaron de lugar y que primero se convierten en realidad los que se vislumbran remotos, Andrés sigue ilusionándose: "tengo un sueño compartido. Quiero debutar en Primera en el campeonato porque hace 9 años que estoy en el club y es como mi segunda casa. Yo acá conozco todos los rincones del Monumental y por eso me estoy matando en los entrenamientos y en los partidos de reserva. Pero no me olvido de que en el Mundial Sub 20 del año que viene la tengo que romper. Lo que está claro es que, pese a las ofertas, prefiero quedarme en River".
 

El llamado de Bielsa:

Cuando Marcelo Bielsa llamó a D'Alessandro sorprendió a todos. El mismo jugador recuerda: "estaba durmiendo en mi casa y me llamó Urtasún (el preparador físico de los juveniles) diciendo que me tenía que presentar en Ezeiza y que viajaba a España con la Selección mayor. Pensé que era una joda, porque primero atendió mi vieja y le dije: Te deben estar cargando. Pero era verdad. Te juro que cuando hablaba con el Profe temblaba de la emoción. Y después fue un lío bárbaro porque me llamaron a las 10 de la mañana y a las 14 tenía que estar en Ezeiza. Tuve que ir a pedir un permiso de viaje porque soy menor de 21" (cumplirá 19 años en abril). Cada entrenamiento era un desafío para D'Alessandro: "Lo que corrí en esos partidos fue increíble. Yo traté de jugar como lo hago siempre y por eso también me llevé un par de patadas de souvenirs en mis piernas", cuenta entre risas. Y se guarda el nombre del jugador, experimentado él, que en uno de esos picados le dijo entre bromas, pero con cara seria: "Nene, dejá de mostrarme la pelota porque te voy a matar".

 
Andrés D'Alessandro Unofficial Website     DALESSANDRO10.tripod.com   www.ELCAMPEONDELSIGLO.com